El pasado domingo 15 de diciembre de 2024 viajé cuatro horas para participar en el evento Palabra-Imagen-Escena (PIE), organizado por Margarita Drago y Juana M. Ramos, que se celebró en Terraza 7, 4019 Gleane St., Queens, NY. Temprano en la mañana salí de la estación de New London, Connecticut, en el tren Shore Line East con destino a la estación de New Heaven. En Union State Station tomé el tren MTA que me dejaría en la estación Grand Central Station. Para mí viajar en tren es una terapia lacaniana, percibo el Otro y desata mi imaginación.
Una vez llegué a Grand Central, busqué el tren 7 que me llevaría a Queens. Montado en ese tren despertaron mis recuerdos. Me acordé cuando mi padre y yo tomábamos el tren. Fue a principio de 1960. Yo era un niño y me fascinaba el sonido del tren. Aquellos trenes tenían un asiento y un guía, yo me montaba y sentía que conducía el tren. Como ocurre siempre, un recuerdo persistente desencadena otros recuerdos que sienten celos de los primeros y cuando vienes a darte cuenta de lo que sucede en realidad has repasado tus primeros años de vida en la ciudad que nunca duerme. Regresé a la realidad llegando a la parada de la 90 St-Elmhurst Av. Al salir de la estación, respiré profundo y recuperé mi temple.
Caminando llegué a la casa del escritor Juan Nicolás Tineo. Él y su esposa fueron atentos y buenos anfitriones conmigo. Compartimos. Conversamos de proyectos en común. A las 4:00 p.m. me fui… En la avenida Roosevelt recordé cuando caminaba las calles de Río Piedras, Puerto Rico, y mi recorrido por Once de Buenos Aires, Argentina. Llegué a la Terraza y reconocí al escritor Tomás Modesto Galán sentado en una silla ojeando un libro de cuentos de su autoría. Me acerqué y lo saludé. Conversando con el escritor, llegaron Carmen Ferreira, Marithelma Costa y el dramaturgo Pablo García Gámez. Subiendo ellos al segundo piso donde se celebraría el evento llegó mi amiga Gladys Varela con un acompañante. Unos minutos después llegaron Margarita Drago y Juana M. Ramos. La alegría, los saludos y los abrazos.
Ante cualquier actividad literaria y teatral en la que participe, o asista como espectador a una de mis obras de teatro, yo paso por unas tensiones intensas inevitables, y puedo controlarlas justo antes del comienzo de la actividad. Y si a ello le sumo que tengo que ejecutar ante los espectadores, se acrecienta la incertidumbre pensando si llegará el público y cómo reaccionará a la lectura de mi texto literario y dramático. Poco a poco fueron llegando los espectadores, y como es natural se comparte con los conocidos y se saluda a los desconocidos. Momentos antes de empezar el evento fuimos al escenario y nos tomaron una foto. Una foto para la historia.
Ya estaba llegando la hora de empezar, el momento de la verdad, ese instante que no podemos eludir y lo consideramos la prueba de fuego. Juana M. Ramos leyó mi biografía y Margarita Drago leyó la biografía de Marithelma Costa. A mí me tocó empezar con la lectura. Pero voy a dar un salto en el tiempo. Al finalizar mi participación, le correspondió el turno a la lectura de un fragmento de la novela La bendición de Rosalía, novela escrita por Marithelma Costa y publicada la Lacriba Editorial.
En dicha lectura de un fragmento fundamental de la novela participaron Margarita Drago, Carmen Ferreira, Marithelma Costa y Pablo García Gámez. Enfrente de las sillas había una escenografía constructivista que simulaba un barco. El fragmento leído fue la experiencia de la mujer protagonista de la historia que vino a Nueva York después de perderlo todo en la isla de Puerto Rico. Fue una escena postmoderna y con mucho humor que disfrutaron los espectadores. Carlos Gardel, muerto, montado en una embarcación, se entera de un sinnúmero de situaciones reales y absurdas sobre su vida y muerte y hace comentarios significativos.
Lo que se argumenta en la lectura es trascendente. Contextualiza la figura de Carlos Gardel y su impacto en el Caribe y América del Sur. La lectura, motivadora, fluyó y aportó información que yo desconocía del mito también apodado El Morocho del Abasto. La lectura sobre Gardel me catapultó a los comentarios que hacía mi padre sobre El Zorzal Criollo. Mi padre argumentaba que después de Gardel no había salido otro cantante de tango como él. Mi padre no conocía a nadie más. Yo le mencionaba a Hugo del Carril y mi padre gesticulaba y decía que Hugo… no le llegaba ni a los talones a Gardel.
Al finalizar la lectura, los asistentes aplaudieron entusiasmados. Me gustó mucho la lectura. Y recomiendo a la escritora que siga repitiéndola cuando se presente la oportunidad y le sugiero que adapte el fragmento en una obra de teatro breve.
En mi participación leí el cuento “Las voces” basado en los últimos minutos de agonía de mi padre, y el monólogo El come panty, que su versión original fue estrenada en el Teatro América el 28 de noviembre de 2023, interpretado por Roberto Martínez bajo mi dirección. Es conveniente decir que Roberto Martínez recibió el premio de actuación destacada y la obra monólogo destacado otorgados por LATA Awards, edición de Puerto Rico.
Regreso a mi participación. Antes de empezar a leer, observé a los espectadores y me permití la unción de Stanislavski. Leer el cuento “Las voces” fue conectarme con mi padre en todos los sentidos y revivir sus últimos minutos en estado de coma e interpretar lo que pensaba antes de que partiera de este mundo, sabiendo él que venía en camino la carreta de la muerte. Fue la primera vez que leí el cuento en público. En mi lectura, imágenes inéditas se me cruzaban y yo realizaba pausas para recomponerme y continuar con mi cometido. Al finalizar la lectura, simulé la muerte de mi padre y recordé que cuando él murió unas lágrimas estaban alojadas en sus ojos.
Esa noche inolvidable, también leí una versión de mi monólogo El come panty preparada para la ocasión que no alteraba la obra original. Sólo que en la lectura omití mis acotaciones de dirección. Yo estaba nervioso… porque el título de mi monólogo tiende a predisponer en contra a los espectadores. Pero una vez que entré en personaje desaparecieron mis temores y me entregué completo a la lectura. Agradezco a todos los presentes las preguntas que hicieron acerca de mis textos y sus procesos de composición e interpretación. Fue un placer interactuar con todos. Acabada la actividad, algunos de los presentes se me acercaron y me dijeron que les gustó el texto de El come panty.
Terminada la lectura del fragmento de La bendición de Rosalía de Marithelma Costa, se hizo un brindis, poético, que propició un fin de cierre apoteósico.
En el primer piso de Terraza 7 nos reunimos los presentes y fue grato ese instante mágico. Vuelvo a agradecer a Margarita Drago y a Juana M. Ramos por invitarme a participar en Palabra Imagen Escena-PIE. Una vez más reafirmé mi sentido existencial.
Para terminar, insto a Margarita Drago y a Juana M. Ramos a que persistan con este proyecto meritorio, porque es justo y necesario, y porque brinda la oportunidad a los escritores y artistas teatrales a compartir con los espectadores.
Carlos Canales
Norwich, CT, USA, 21 diciembre 2024.
Carlos Canales (Puerto Rico, 1955). Dramaturgo, narrador y educador. Graduado de la Universidad de Puerto Rico en Ciencias Políticas, Drama y Educación. Obtuvo el grado de maestría en español en University of Connecticut. Ha estrenado más de 40 obras de teatro. Ha publicado más de 20 obras.Ha publicado dos libros de cuentos y una novela.Ha recibido premios por su labor literaria y educativa. Sus obras se han representado en Argentina, México, España, Inglaterra, Estados Unidos, Canadá, Venezuela, Costa Rica, República Dominicana y Perú. Algunas obras son texto en universidades europeas, norteamericanas y latinoamericanas.
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